En la actualidad se presta mucha atención en la experiencia y en la interacción que tiene el usuario cuando ingresa a una aplicación o web, por ello el diseño de una interfaz posee ciertas características principales que deben respetarse para lograr los objetivos.
Está claro, que el diseño de una interfaz exitosa, requiere de varios aspectos, pero uno de los más importantes es que los profesionales que la desarrollen posean excelentes habilidades de diseño, amplios conocimientos y por supuesto comprendan a la perfección las necesidades de los usuarios.
Ahora que ya quedó claro de que se trata el diseño de interfaz, explicaremos en detalle cuáles son las características principales, que por cierto todas son sumamente importantes para lograr un buen desarrollo.
Las 9 características del diseño de interfaz son:
- Claridad
- Concisión
- Coherencia
- Legibilidad
- Interactividad
- Flexibilidad
- Familiaridad
- Eficiencia
- Atractiva
Características del diseño de interfaz
Si quieres conseguir un buen diseño de interfaz, ten en cuenta cada una de las características que explicaremos a continuación, ¡son muy útiles!
Claridad
No cabe duda que esta característica no puede faltar, como mencionamos en la introducción de este artículo, uno de los objetivos del diseño de interfaz es que el usuario posea una experiencia satisfactoria y para ello la claridad es clave.
¿Qué queremos decir con esto? Toda la información que esté en la web o en la aplicación debe ser transmitida de manera precisa.
Concisión
Esta característica está estrechamente relacionada con la anterior y ambas tienen la misma importancia, porque la información debe ser clara, pero para llegar a eso no es necesario que se agregue de más.
Aunque a veces resulte “raro”, es posible ofrecer poca información y lograr una comunicación efectiva con el usuario. Con esto queda más que claro que la información debe ser clara y concisa.
Coherencia
Cuando hablamos de coherencia nos estamos refiriendo a la “comodidad” que se le ofrece en el diseño de interfaz a los usuarios. Si esto existe, será beneficioso para los mismos porque a medida que utilicen la web o aplicación podrán aprender diferentes funciones y desarrollarán patrones de uso.
Legibilidad
Utilizar un lenguaje simple y claro en el diseño de interfaz es un factor clave para que todos los usuarios puedan realizar una lectura rápida. Además, esto les permite que se acostumbren a las distintas funciones que dispone la interfaz.
Recuerda, si la información es fácil, se procesa más rápido.
Interactividad
El sinónimo de una buena interfaz es igual a rapidez. Esta característica favorece notablemente la experiencia que tiene el usuario al acceder y permanecer en la interfaz. Las diferentes acciones que se puedan llevar a cabo, deben concretarse rápidamente, caso contrario el usuario se irá a otra interfaz.
Además de la rapidez, la interfaz debe ofrecer información al usuario sobre las distintas tareas que se hacen en el momento.
Flexibilidad
En esta característica hay que tener en cuenta tres aspectos que no pueden faltar, por un lado, la interfaz debe tener la capacidad de eliminar aquellas acciones erróneas que realice el usuario, como así mismo también poder restaurarlos sin problemas.
En cuanto al tercer aspecto, la interfaz debe generar copias de seguridad automáticamente.
Familiaridad
Lo ideal es que los usuarios estén familiarizados con la mayoría de los elementos que estén en la interfaz. Esto significa que cada uno de los elementos esté en el lugar correcto. Además, una buena alternativa es agregar atajos hacia aquellos elementos que se utilizan con mayor frecuencia.
Eficiencia
A la hora de crear una interfaz de usuario, es necesario e imprescindible entender los objetivos de los usuarios. Para ello, se debe pensar en detalle cada aspecto para que el usuario pueda conseguir lo que desee en el momento que lo elija.
La eficiencia en el diseño de una interfaz indica que el usuario no debe sentirse nunca incómodo, como cuando, por ejemplo, se agregan opciones adicionales sobre lo que se desea realizar, demorando el proceso.
Atractiva
Como venimos remarcando a lo largo de este texto, el diseño de interfaz está pensado en relación con el usuario. Además de ofrecerle herramientas que llamen la atención y sean sencillas de manejar, se debe prestar mucha atención en la parte visual.
Recuerda que esta característica es la primera que se observa al ingresar a una web o a una aplicación. El diseño debe ser perfecto, atractivo, que tenga el poder de llamar la atención de la persona y lo incentive a quedarse en la interfaz.
¿Por qué es importante respetar las características a la hora de realizar el diseño de interfaz?
Por supuesto que cada diseñador lleva a cabo el trabajo como lo cree mejor, pero como pudimos visualizar a lo largo del texto, el diseño de una excelente interfaz de usuario requiere de la utilización de cada una de las características descritas.
En pocas palabras, si se incorpora cada uno de los puntos, el usuario podrá comprender fácilmente todas las tareas, por lo cual la interfaz será usable y adaptable a las necesidades de los mismos.
Si quieres conseguir un diseño de interfaz que cumpla con todo lo que te enseñamos hasta aquí, ¡Contáctanos, te esperamos!
Conclusión
Debes tener claro que las mejores interfaces son aquellas donde el usuario se olvida que está interactuando con una aplicación, dispositivo, etc. Por ello, al momento de desarrollar el diseño de una interfaz, son necesarios agregar todos los elementos desarrollados en el artículo.
Al saber con anterioridad cuáles son, resultará mucho más sencillo analizar cada detalle y quitar aquellos elementos que no sean prioridad e intervengan en la experiencia del usuario.
Para terminar, ten en cuenta que el único o más importante propósito de una interfaz es la interacción del usuario con el sistema, por eso debe ser fluida y simple de entender. ¡Es posible el desarrollo de una buena interfaz de diseño: sigue cada uno de nuestros consejos!